miércoles, 24 de diciembre de 2008

Viviría Muriendo...

Viviría muriendo si obedecezco obsesionado en tu pedido de que no me vuelva a enamorar,
Viviría muriendo con lentitud creyendo únicamente en el ideal que despliega mi mundo imaginario,
Viviría muriendo desvanecido si ignorara el desamor que rondaba por esa casa,
Viviría muriendo delicado esperando a la mujer que crearon especialmente para mí,
Viviría muriendo sedado si ignorara mi empatía y mi intuición para perderme sin luz.
Viviría muriendo desgastado si no me deslizara en la música que me pacifica,
Viviria muriendo ahogado si despreciara todo acto de bondad que me regalas.

Por suerte vivo de pie, porque sigo mis instintos,
Porque siento tu dolor y me làstima hasta que puedo reaccionar y ayudarte,
Vivo de pie, porque me emociono hasta las lágrimas cuando me decis esas palabras dulces al oído.
Creo en lo que digo y en el camino que transcurrí hasta poder plasmar mis ideas.
Porque vivo en el presente abstraído del tiempo.
Vivo orgulloso de transformar las penas en lecciones de vida.
Las broncas ya no toman mi cuerpo para explotar en mis arterias,
Vivo con el pecho hacia el cielo porque el amor está tomado de mi mano y solo suma importancia a cada segunda de vida
Vivo y simplemente vivo, confiando en lo que soy y en la sensación de haber escuchado cada señal que mi ser aullaba.
Vivo con la piel recubierta de una sensación de bienestar, en la que apoyas tu larga cabellera mientras acaricio tu cuello, así describimos con pocas palabras lo que es el amor.
Vivo sin pensar en los que me dañaron y me dan pena por ellos los momentos en los que jugaron conmigo.
Que lejos estoy de ese chico que lloraba en la terraza de la casa hasta agotar sus lágrimas,
Que lejos estoy del vacío que me generaban tus miradas de frialdad, quemando la piel que se estiraba pidiendo piedad.
Que lejos estoy de esos escritos en los que te declaré mi amor no correspondido.
Que lejos estoy de pensar que algún día serías para mi, y que cambiarías tu vida para cambiar la mia.
Ahora creo en lo real, creo solo en las caricias a mi alma.
Creo en el aroma de la lluvia cuando se marcha,
En el verdadero Sol que anestesia para brindar una siesta placentera.
Creo en la vida que despliegan los pechos de una madre.
Creo en esos textos que me escribiste para que desestructure mi sensación de apocalipsis,
Creo en esos momentos en que te desvivías para sacarame una sonrisa, y que en secreto guarde para mi soledad.
creo en mi para hacerme bien y que el resto solo me aporte sumando a este aprendizaje que es mi vida.
Creo en ese viaje en el que prometí no olvidarme todo lo aprendido.

2 comentarios:

ade dijo...

- Es tan hermoso dejarse acariciar el alma. Ade

ArteDelTodo dijo...

Hola Mira, por donde andas? Cuando lo abri el blog chilló como una puerta herrumbrada. Vamos! A volcar una de todas esas ideas que tenes en la cabeza, no seas tacaño.